Si algún día el señor Rajoy llegara al Poder, se convertiría en el primer presidente que gobernara ad hominem, es decir, antes de tomar cualquier decisión política leería las propuestas de la oposición y haría lo contrario. Comprobaría también las últimas leyes promulgadas por ésta y trataría de anularlas “de la A a la Z”, como ha dicho últimamente: Derogaría así, las leyes de Dependencia, las del Divorcio rápido, las de Plazos para el aborto, descasaría a los cónyuges homo o haría obligatorio el fumar.Parece broma, pero ya ha manifestado disparates parecidos.Lo que queremos decir es que se plantee lo que se plantee, el buen opositor a registrador no da muestras de serlo así en la política, donde sólo parece estar capacitado para soltar denuestos, nunca para hacer una propuesta alternativa. En toda su trayectoria política sólo se le conoce por prestarse a los “marrones” que le encomendaba su mentor y por permanecer agazapado en los dramáticos días de Marzo del 2004. Durante sus casi seis años de opositor no ha presentado el menor proyecto alternativo a los del Gobierno del PSOE . Ante la grave crisis económica actual no ha dicho nada que no sean descalificaciones lapidarias a Zapatero: la Ley de Economía Sostenible le parece disparatada y suicida, pero es absolutamente incapaz de proponer otra; la verdad, no sabemos para qué encabezó su candidatura con aquel ecónomo agiotista.
Para lo único que parece mostrarse diligente este hombre es para rebuscar votos allá donde haya un colectivo agraviado, aunque lo haya sido por su propia imprudencia.
Su última actuación ha sido la de ser el único partido que no apoyará las leyes anti-tabaco en locales cerrados; quizá su sociólogo de cabecera haya hecho los cálculos de lo que se gana y de lo que se pierde en votos si se apuesta por el humo público; un asunto, por cierto, en el que ha hecho una piña la usurpadora de Madrid y su zangolotino consejero de Sanidad, a quienes también la salud pública les trae al pairo.
¿Qué tipo de Estado nos esperaría con una gente que sólo piensa en gobernar por encima de todo?
A mitad de Legislatura es difícil prever los candidatos para 2012. Si repite Zapatero será porque la economía ha mejorado, porque la Oposición ha seguido sin decir nada positivo o porque los socialistas no han madrugado para dar a conocer otro candidato pero han ganado las elecciones.
Si Rajoy consigue la nominación tras el congreso de su Partido, se deberá, quizá, a que éste trate de evitar un resquebrajamiento entre los aspirantes: descartado “el Curita”, que bastante tiene con eludir con sus “amiguitos del alma” las imputaciones penales, quedan los dos candidatos madrileños, salvo que aparezca algún outsider, como aquel pipiolo rompecoches valenciano.
La populista arrabalera de Madrid, que ha mostrado que no da su brazo a torcer así como así aunque haya tenido que tragarse lo de Caja Madrid, cuenta con su cortijo televisivo y otros apoyos mediáticos importantes, amén del apoyo de las redes clienterales creadas tras dos legislaturas en la Presidencia de esa Comunidad Autónoma.
Comparte la pole position el alcalde de Madrid, el déspota ilustrado Gallardón.
Diametralmente opuesto a su principal contrincante en cuanto a cultura, modales y formas florentinas en su trayectoria política, cuenta con menos querencias en el aparato más ultramontano. Quizá buscando notoriedad, ha jugado fuerte en dos partidas en el último período. Una, la candidatura a los Juegos Olímpicos, a sabiendas -y si no lo sabía sería aún peor aún porque demostraría su ignorancia en Relaciones Internacionales- que el favorito era el Brasil de Lula, o Lula de Brasil.
La segunda partida puede que le haya pillado por sorpresa –como a Zapatero-, se trata de las inversiones que hipotecó en obras faraónicas cuando las vacas negras mugían ya en el horizonte. En los próximos años tendrá que sacar los 7.000 millones de deuda de debajo de las piedras que innecesariamente levantó en las calles A los ciudadanos les molesta pagar impuestos abusivos y redundantes y puede que pierda puntos , al menos en su feudo de Madrid.
El primer round lo perdió cuando tuvo que conceder que Aznar le arrebatase la Comunidad de Madrid para dársela a la señora Aguirre. Los apoyos en un municipio no parecen suficientes para catapultarle a la Presidencia. En cuanto a sus apoyos mediáticos, de hacer caso a las falanges lunáticas de Intereconomía, le apoyaría El País,
que desairado por el apoyo de Zapatero a un grupo mediático de izquierda, lanza continuas cargas de profundidad contra el Presidente. Recordemos cuando en la campaña de 1996, ese diario, criticando ácidamente a González, coadyuvó a la victoria de Aznar.
Aparece clara la derechización del grupo Prisa en los últimos tiempos. Un ejemplo es el editorial del domingo último (3/1/2010), que bajo el titular de “Fiebre recaudatoria”, critica las subidas de impuestos, y acaba con el siguiente párrafo: “La sospecha de que detrás hay un mero afán recaudatorio está más que justificada”.
Resulta insultante que el primer diario del país no mencione que el Gobierno haya tratado de compensar todo el dinero que ha tenido que cargar al déficit para paliar la situación de los desempleados. ¿De dónde piensan los magnates de PRISA que sale el dinero público, sino de los impuestos? Otra cosa es que hubieran criticado el peso de los impuestos indirectos sobre los directos, pero es un asunto de la prensa de izquierdas.
Otro detalle recientísimo es la fusión del canal Cuatro (una concesión del PSOE a PRISA) con la tele de Berlusconi. Parece que el primer afectado haya sido Iñaki Gabilondo, que ha salido disparado a CNN+.
Surgen muchas dudas sobre que el PP dé una carta en blanco para un tercer intento a un Rajoy, que de la incredulidad de su derrota en 2004 pasó al estupor en la de 2008. Un tercer intento fallido podría suponer una desmoralización similar a la de la AP de Fraga, tras haber fracasado en sus múltiples intentos.
JGM