2011-11-15

La izquierda soñadora

Las últimas encuestas auguran para la coalición IU el doble de los votos obtenidos en 2008. Todos creemos saber de donde vienen esos votantes: del PSOE; porque a nadie se le ocurriría imaginar que un votante del PP pudiera sufrir una alucinación paulina que lo llevara a votar a una lista encabezada por un comunista, comunista; de los de antes, de los de siempre.

Y es que la coalición sigue articulada en torno al PCE, uno de los últimos reductos que conserva esa denominación de origen -el PCUS, máximo referente del llamado “socialismo real” fue ilegalizado en Rusia en 1991, tras su último intento de golpe de Estado. El PCI, el partido comunista más importante de la Europa democrática, había desaparecido pocos meses antes.

Lo cierto es que los comunistas han tenido muy claro, al menos desde el primer cuarto del siglo pasado, cual es su principal enemigo político: la socialdemocracia. Tras la elección de Gaspar Llamazares como coordinador, la coalición pareció seguir una línea de aproximación al PSOE y de enfrentamiento con el PCE, liderado por Francisco Frutos –otro comunista, in primis, pero el doctor fue, quizá por ello, condenado al ostracismo asturiano.

La queja principal de IU es la falta de proporcionalidad del sistema electoral, pero ¿se sienten capaces de explicarle a los electores cómo, en sólo tres legislaturas, consiguieron bajar de 21 escaños a sólo uno en 2004 (el otro es de su compañero de lista), perdiendo las dos terceras partes de sus votos. Lamentan de que sus votos se diluyen en las múltiples circunscripciones, pero ¿qué obtuvieron en las últimas elecciones al Parlamento europeo, donde hay una sola circunscripción: uno y otro para el compañero de lista, igual que en las generales.

En fin, creo que deberían entender que la fórmula de la Ley electoral es una variable independiente mantenida desde la transición; lo que varía en el computo para IU es el número de sus votantes.

Volviendo al cabeza de lista, al señor Caro Lara, reconozcamos lo dicho anteriormente: que sabe quien es su mayor enemigo político; de ahí que no le importe pactar con el PP (Extremadura) o hacer la pinza contra el PP, como hizo su iluminado antecesor, el señor Julio Anguita. Sabe que los terrenos entre PC y PP están tan delimitados que es prácticamente el trasvase de votos de uno al otro, sobre todo del segundo al primero.

Esa clarividencia sobre el enemigo hace que todos los dardos del señor Lara vayan dirigidos hacia el PSOE. Pero aparte de esas invectivas, qué dice este comunista. Entresaco de una entrevista en El País (13/11/2011):

“El PSOE está roto. A los socialistas les pido el voto a pecho descubierto”

“No saco lecciones de lo que pasó en Extremadura. Es agua pasada”

“¿Presos políticos en Cuba? Veo mucho montaje. Tengo que ir para informarme”

En enero de 2010, tras el terremoto de Haití, criticó a Zapatero y a Obama:

"Cuba ha llevado a Haití médicos; Estados Unidos ha llevado militares. ¿Eran necesarios 10.000 militares de Estados Unidos en Haití?"

Un comentario éste último donde se juntan la demagogia, la malicia y la proyección psicológica. Olvida, acaso, este miembro del CF del PCE, las invasiones soviéticas de los países donde no les agradaban sus derivas ideológicas: 1956, Hungría (2500 húngaros muertos, 1300 heridos y 2000 fusilados más tarde); 1968, Checoslovaquía; 1979, Afganistán.

Pero, en realidad, la mayor masacre se produjo en la propia Rusia, bajo el sistema comunista –Solzhenitsyn calcula que fueron entre 40 y 50 millones los que cumplieron condenas en el gulag entre 1917 y 1953. Los Veinte Millones” de muertos podrían ser muchos más porque Stalin, tras la confección de los censos, tenía la costumbre de fusilar a los demógrafos.

En fin, bienvenidos sean los nuevos votantes al último refugio de la izquierda soñadora.

Julio G Mardomingo

1 comentario:

Gabri - paginas web dijo...

No soy español pero la politica de españa la verdad que si genera una gran cortroversia siempre...