Grosería y fascismo en Castellón

El emperador romano Calígula nombró senador a su caballo; el ex presidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, nombró senadora a la vacaburra de su hija.

 ¡Qué familia! Ese tipejo, probablemente el menda más “afortunado” por los avatares del juego de azar, es el que gracias a sus enjuagues con los jueces amigos ha conseguido desde hace años no sentarse en el banquillo por tráfico de influencias, cohecho y varios delitos fiscales. Parece que cuando el sumario que lo imputaba afloraba  a la superficie, una mano negra lo volvía a colocar al fondo del montón.

Resulta ahora que el juez titular de Nules se ha negado a posponer el juicio contra ese sátrapa;  pero hete aquí que los que mandan en la Audiencia de Castellón, Carlos Dominguez y sus secuaces, parece que quieren seguir librando al presunto chorizo; por ello, el juez Pin ha pedido amparo al CGPJ, argumentando que esa gente pretende perturbar su independencia.  En fin, confiemos en que a este juez no le pase lo que a Garzón.

Ese agiotista, el tal Fabra, ha mostrado públicamente el mayor cinismo. Construyó un aeropuerto en Castellón en el que jamás se ha posado, ni presumiblemente aterrizará nunca un avión. Suponemos que pensaba que la pista mayor de Europa le serviría para crear un emporio de campos de golf, casinos y ladrillo amontonado en la costa. Cuando alguien le reprochó el gaspillage, respondió algo así como que serviría para que pasearan los ciudadanos por sus pistas. Su lema era “las urnas me absuelven”, y no le faltaban sus razones: los ciudadanos de Valencia lo votaban masivamente, al igual que a los de los trajes, los coches deportivos y los “pelucos que dan el cante”; lujos horteras pagados con dinero público. Pareciera que casi todos los votantes del PP, encandilados por el dinero que manaba de los ladrillos: Copa América, circuito de Fórmula 1,  Terra Mítica, Ciudad de la Luz, Canal 9, visita del Papa, apariciones de la Vírgen y ¡la hostia!; amén de ese precioso aeropuerto sin aviones, acudían a las urnas con el voto machihembrado. No olvidemos lo principal: unos bancos y unas cajas de ahorro donde sus consejeros abrían la safe y sacaban los que les cabía en el bolsillo. Hoy, hacen huelga los trabajadores del Canal 9, probablemente los mismos que hasta poco colaboraban en el agitprop del curilla Camps. 

Parece que los del PSOE han encontrado algo que morder en el ex abrupto de esa idiota. Bueno, los colegas del PP aplaudirán fervorosos su ignominia, al igual que rompieron en aplausos cuando Rajoy justificó la bajada en el subsidio de paro diciendo que así se afanarían más los parados en encontrar trabajo; como si los empleos estuvieran ahí esperando al más veloz. Porque sabido es allende las fronteras que el Presidente es un mentecato, pero un mentecato falaz y dañino, como tantos merluzos que se acercan a la política huyendo de no se sabe qué.

Parece que los catalanes de CiU van a votar en contra de los recortes. Bueno, toda le quedan algunos apoyos a esa banda de fachas: los populistas de Rosa Díez, que les han entregado la alcaldía de Alcalá de Henares. También  los comunistas enmascarados en IU, que gobiernan tan felices los recortes en Extremadura.

No sé cómo todavía buscan los socialdemócratas alguna alianza con esa gente. Con ese coordinador cínico que niega que haya presos políticos en Cuba, diciendo que el estuvo allí hace poco y que no vio ninguno. Le llevarían únicamente al Tropicana.

Es la misma gente: comunistas chinos y exchequistas rusos, que siguen apoyando el genocidio sirio a manos del repugnante asesino Bashar Al-Assad.

Julio García  Mardomingo